Si quieres retar tu nivel de concentración, intenta contar tus respiraciones, es un práctica Zen.
Siéntate en una posición cómoda, con la columna derecha y la cabeza inclinada un poco hacia delante. Cierra los ojos, inhala y exhala. Después deja que te llegue la respiración de forma natural sin tratar de manipularla. Idealmente debe ser suave, silenciosa y despacio, pero el ritmo y profundidad depende de cada persona. .
- Para empezar el ejercicio cuenta “uno” para ti misma mientras exhalas
- La siguiente cuenta “dos” y exhala y así hasta llegar a “cinco”
- Luego empieza a volver a contar desde “uno”
Nunca cuentes más de “cinco” y solo cuenta al exhalar. Sabrás que has perdido la concentración cuando te des cuenta que ya vas en el número “ocho” o “diez”.
Intenta hacer este ejercicio de meditación diez minutos.